Notas del 16

Y como siempre después del grito de independencia en la noche del 15 de septiembre el día 16 muchos de los mexicanos esperamos con ansia el desfile militar.

Debo confesarles que yo soy una de las personas que jamás había asistido a un evento masivo de este tipo sin embargo hoy con gusto puedo decirles que me encantó.

Aunque con sus bemoles con muchos asistentes que venían directamente del zócalo de la fiesta del día anterior o algunas personas qué por acaparar un lugar en las primeras filas donde pasaría el desfile se dedicaron apartar lugares o a no dejar pasar a otras personas pero esas fueron las mínimas.

Vi con agrado algunas contingentes que tuvieron más aplausos que otros como por ejemplo los paracaidistas, los bomberos, las enfermeras entonando su himno y con marcha rigurosa, todas las bandas de guerra de los diferentes escuelas, la escuela naval militar la milicia encargada del plan DN3E o incluso la misma policía militar.

Y algo que jamás había visto y sobre todo en las emisiones televisadas es el final del desfile, después del momento en el que las llamadas charamuscas o mujeres a caballo cierran el desfile militar adornando con su belleza y sus hermosos caballos, fue el personal de limpia el cual también fue aplaudido por todos los asistentes, de hecho nadie se movía de su lugar hasta que pasaron y los policías de la secretaría de seguridad ciudadana comenzaron a levantar las bayas. Los uniformados de amarillo fluorescente con sus escobas de cara en mano y sus recogedores improvisados de botes de plástico o de placas de lamina reciclada, reían y algunos se apenaban con tal expresión de gloria a su paso.

Un gran sentimiento invadió las calles, porque obviamente todos y cada uno de los que participan en el desfile son importantes, no solo la gente que abre el desfile, la que cierra sino todos los que están alrededor de la organización, desde policía militar, policía federal, seguridad ciudadana, limpia, servicios urbanos o incluso el personal de participación ciudadana de la Ciudad de México, o las familias, las personas que sin importar el clima o las aglomeraciones, asiste cada año en correspondencia a un evento que nos valida como conacionales.

Gracias, porque fue un gran espectáculo y yo creo que son de los pocos eventos que unen a los mexicanos y se siente es espíritu de unión, sin importar preferencias políticas, ideales o elecciones grupales, eso, como en pocos eventos, estuvo presente.